¡¡ EL INCREIBLE "HOMBRE DEL GANCHO" !!!

Existe un personaje en la mitologia betetera conocido "El hombre del gancho" que es aquel individuo que por su condición y su poderio suele ir siempre en cabeza de cualquier grupo, remolcando al mismo tiempo al resto de la peña con su empuje y su determinación.

Es por eso que es a la vez admirado por algunos compañeros del grupo con mejores capacidades fisicas y odiado al mismo tiempo por los que no pueden seguir su ritmo poderoso y decidido.

En el grupo de los BARRIGAS tenemos un genuino exponente de este personaje mitologico que , aunque no me gusta dar nombres, solo diré que tiene un inequivoco acento aragonés y en su defecto existen otro par o tres de elementos que pueden hacer las mismas funciones de "hombre del gancho".

Pero este sábado no acudió a la cita ninguno de los posibles candidatos.

Como suele suceder ultimamente, es un misterio quien va a aparecer a la hora prevista en el sitio indicado, y este sábado nos encontramos 4 bikers dispuestos a rodar rumbo a Collserola: Dani, Jaime, Armand y yo.

El objetivo inicial era intentar llegar hasta La Creu D´Olorda, pero debido a algunos desajuntes en mi Silver Surfer consideramos mas prudente no embarcarnos en tal proyecto y contentarnos con llegar a Villapescuezo ( Can Coll ) que tampoco esta mal.

Eso si...no ibamos a elegir el camino mas facil ni estabamos dispuestos a esquivar esfuerzos asi que empezamos subiendo a Sant Onofre por la directa para descender por la "trialera del perro" y asi hacer una entrada triunfal en "COLLSEROLA NATIONAL PARK".

Continuamos por el "campo de habas" haciendo previamente su megarampón de acceso que nos puso a prueba a los cuatro, consiguiendo solo uno de nosotros subirlo montado en la bici.

Empalmamos con la pista de Can Catá y nos encaminamos hacia la "cuesta del ritmillo".

Hasta este momento el grupete habia ido bastante homogeneo en el rodar, permitiendo incluso que algunos fueran casi todo el camino con una animada charla.

Pero cuando llegamos a la "cuesta del ritmillo" aparecio EL HOMBRE DEL GANCHO....

Increiblemente ¡¡ JAIME !!! empezó a ejercer de lider de la escalada imprimiendo una alta cadencia de pedaleo que nos obligo a dejar el "cotorreo" para otro momento.

La cosa iba en serio...el ritmo se aceleró de manera que hubo que aplicarse en serio para poder seguirlo.

Llegamos al pequeño tramo técnico de la subida en el que hay que superar un paso de unos 10 metros de roca descarnada y en el que Jaime y yo demostramos que la experiencia es un grado ya que ademas de llevar el desarrollo adecuado, conocemos de memoria donde y como es mejor abordar el paso.

Una vez superado este trozo, nuestro HOMBRE DEL GANCHO continuó con su implacable ascenso.

Los demas estabamos flipando y a duras penas conseguiamos mantener el ritmo.

Hasta que al final para colmo, Jaime sacó una nueva marcha que aun tenia escondida en la recamara y poco a poco consiguió ir abriendo hueco con nosotros ante nuestros incredulos ojos y nuestra derrotada moral.

Al final EL HOMBRE DEL GANCHO llegó al Forat del Vent con almenos 50 metros de ventaja.

¡¡ QUE SUBIDÓN !!

Pero ahora tocaba bajar y despues de enlazar el senderito del Forat del Vent iniciamos su trialera, terreno ideal para Dani al que conseguí mantener a raya poniendome en cabeza en el descenso, esto era con la excusa de que Dani no conoce Collserola....que sinó "otro gallo cantaria".

Acabamos en la transitada pista principal de Can Coll y con su variante senderil llegamos a "Villapescuezo" justo a tiempo para ocupar una mesa de su concurrido merendero.

Aqui dimos rienda suelta a nuestras mandibulas con los manjares que cada uno habia considerado oportuno cargar....

Alguno se dió un festín con su "Ultraespecificaproteicamegadieta del tuperware".

Los demas nos conformamos con nuestros clásicos y humildes bocatas de pan de diversas madres y embutidos de diversos cerdos...eso si...acompañado de unas olivillas de sobre y unas cocacolillas que logré abrir sin provocar ese espectacular "efecto Geiser" que tan bién se me dá.

Y todo rematado sabiamente con un postre de músico compuesto por un paquete de almendritas del supermercado y unos cortadetes de la barra del bar del merendero....TODO UN LUJO.

Para la vuelta optamos por recuperar un intinerario olvidado por su relativa dureza pero para el que hoy estabamos adecuadamente motivados...la subida por Can Sardá.

No es que sea una subida durisima, pero normalmente despues del almuerzo, las fuerzas ya están un poco tocadas y solemos optar por repliegues mas comodos.

Y aqui nuevamente EL HOMBRE DEL GANCHO sacó a relucir sus armas y volvió a tomar la delantera quizas sin tanta determinación, hasta que llegó el momento que, por votación popular, decidimos hacer una paradita tecnica para "espelecharnos" ( quitarnos las chaquetas, vaya ).

Ahora ya Jaime dejó tomar la delantera al que se atreviera a tomar las riendas del rumbo a seguir y acabamos coronando en nuestro conocido JUACO ( El Portell de Valldaura ).

Hicimos el "Matamachos" de bajada para llegar de nuevo al Forat del Vent y ahora tomamos rumbo a la trialera que me enseño mi compañero de curro Iván y que desciende hacia la plaza Karl Marx.

El descenso de esta divertida trialera fué seguida del suave ascenso que nos depositó en el castillo de Torrebaró.

El descenso del camino del "saludo a la urbe" nos depositó en el barrio de la Trinidad donde ya urbanisticamente nos dirigimos hacia "Santa Calorra de Garrulet".

Para rematar la faena, cruzamos "Santaco" por el parque Europa y por el hospital psiquiatrico aparecimos de nuevo en Montigalá donde disfrutamos de los descensos de las pistas de Cal Alemany.

Al pasar por delante de la St Charmen Clyninq nos encontarmos con Paco "vas bien??" que ha salido un rato a "entrenar" por su cuenta para no acabar de perder el "tonillo" que tanto le cuesta "encontrar" y que tanta falta le va ha hacer para el Turó del Home.

EN RESUMEN....

Una gran salida, con una espectacular sorpresa por parte del HOMBRE DEL GANCHO y en el que nos hemos reencontrado con algunos de los caminos olvidados desde hace mucho tiempo y que antes tanto frecuentabamos.