Buscando el fresquito
Este sábado, nos reunimos en el parking de Arbúcies, 5 barrigas: Sergio, Chordon, Aleix, Michel y yo, la Glamour.
Huyendo del calor, la semana anterior salió la propuesta de ir hacia una zona más en sombra.
Yo en particular, había estado muchas veces por esa zona, pero nunca la había recorrido en bici.
Empezamos la subida, y desde un principio, me sorprendió!!
Una zona con una vegetación sorprendente, helechos enormes, abetos… por un momento parecía que estuviéramos en el Cretácico!!!
La subida es bastante progresiva, sin muchas cuestas empinadas, que yo les llamo del puto infierno. Bueno o eso me parecía a mi y a los demás que iban con eléctrica, no sé si Aleix pensaría lo mismo, ya que era el único pulmonar. Pero mi peque no deja de sorprenderme, el cómo siempre dando el callo como si no le costara!
Llegamos al Coll de Te y Chordon y Sergio comentaron que había una especie de Restaurant que no sabían si seguía abierto, así que fuimos a investigar. Un buen barriga no deja nada al azar.
Y si, estaba abierto.
Nos reciben un gallo y todo su harén, eso propicia comentarios como… quien fuera gallo!!
Empezamos pidiendo lo más importante, las cervezas y luego la comida, entraña, churrasco, huevos (de las gallinas que rondaban por allí) y patatas. Ya que estábamos , porque no un carajillo de bayleis y un chupito? Se nos fue de las manos, salimos de allí a gusto, pero con 35€ menos cada uno!!!
Proseguimos el ascenso hasta llegar a Santa Fe.
Desde allí iniciamos un corriol donde sólo había hojas y ramas sueltas. Esto hizo que yo en alguna ocasión pusiera pie a tierra, pero dignamente quedó para mi. Después de dudas de donde tenía que hacerse el descenso, volvimos a subir el mismo corriol y ahora si, empezaba el mambo!!
Michel, Aleix y Sergio deciden bajar por un corriol que pintaba rojo oscuro. Chordon y yo, muy inteligentemente, volvimos por la pista de subida hasta el parking.
No podemos esperar en los coches, hasta que los osados corrioleros volvieran, así que fuimos a buscar un bar con terraza para tomar una birra. Chordon, esto es Arbúcies o el zoco de Marrakesh!!!
Súper integrados en el bar, pedimos un Aquarius, jajajaja, ya sabéis, ese agüita amarilla con espuma!
Una ronda, segunda ronda… aparecen los 3 mosqueteros. Habían bajado por un corriol, al parecer nada fácil, y Sergio como si se hubiera peleado con 5 gatos, en sus espaldas llevaba dos caídas, que afortunadamente no llegaron a peligro.
Última ronda y despedida hasta la próxima!!